Con el uso continuado, algunas piezas de la bicicleta pierden eficacia, generan ruidos o directamente dejan de cumplir su función. En nuestro taller revisamos el estado general de tu bici y sustituimos los componentes que muestran desgaste excesivo, como cadenas, piñones, platos, pastillas de freno, zapatas, cubiertas, cámaras, cables o rodamientos.

Solo trabajamos con recambios compatibles y de calidad contrastada, para garantizar que tu bicicleta funcione correctamente y de forma segura. Si tienes dudas sobre qué piezas necesitas, no te preocupes: nosotros nos encargamos de todo, desde la identificación hasta el montaje final.

Un buen sistema de frenado es esencial para tu seguridad, especialmente en entornos urbanos o en rutas exigentes. En nuestro taller revisamos a fondo tus frenos, ya sean de zapata o de disco, y corregimos cualquier fallo: poca presión, ruidos, falta de respuesta o desgaste de las pastillas.

Si es necesario, sustituimos los componentes por otros nuevos y realizamos el ajuste fino para que el tacto del freno sea firme, progresivo y sin vibraciones. Sabemos que confiar en los frenos marca la diferencia entre un paseo cómodo y una situación peligrosa. Por eso tratamos cada revisión con la atención que merece.

Sabemos que no siempre es fácil saber qué componente necesita tu bici. A veces un pequeño fallo puede deberse a una combinación de piezas o a una instalación incorrecta. Por eso ofrecemos un servicio completo de diagnóstico, donde analizamos el problema, localizamos el recambio adecuado y lo instalamos con precisión.

Nuestro objetivo es que no tengas que preocuparte por compatibilidades ni por errores comunes al montar piezas por tu cuenta. Tú solo cuéntanos qué notas en la bici, y nosotros nos ocupamos del resto: desde el análisis hasta dejarlo todo perfectamente ajustado y listo para rodar.